Teniendo presente que no puede haber análisis sin datos, investigadores científicos de la Rheinische Friedrich-Wilhelms-Universität Bonn en Alemania y de la Eidgenössische Technische Hochschule Zürich (ETH) de Zúrich, Suiza, han generado una base de datos que contiene más de 6.000 políticas agroambientales, permitiendo así a funcionarios, responsables de políticas públicas e incluso representantes de empresas poder buscar respuestas para todo tipo de preguntas.
Cabe destacar que dicha base fue originada a partir de un proyecto en el cual trabajaron ambas instituciones académicas y de investigación, proyecto que fue apoyado por el European Research Council and the PhenoRob Cluster of Excellence.
Ahora bien, se informó además que los investigadores han utilizado dos ejemplos para demostrar cómo se puede hacer esto: cómo el desarrollo económico de un país está vinculado a la adopción de políticas agroambientales y cómo dichas políticas impactan la erosión del suelo.
Si bien la agricultura es vital para nuestra supervivencia y bienestar, también es responsable de importantes emisiones de gases de efecto invernadero, pérdida de biodiversidad y degradación del suelo. Por lo tanto, los países están adoptando todo tipo de políticas diferentes para hacer que la agricultura sea sostenible, desde regulaciones hasta el pago de servicios agroambientales.
En opinión de dichos investigadores, lo que dificulta el seguimiento de los avances en políticas públicas es que cada año se introducen nuevas leyes, programas y esquemas en todo el mundo, mientras que en otros años se abolen otros cuerpos legales. Este es un problema de complicación para los responsables de la toma de decisiones políticas: ¿Cómo van a hacer comparaciones? ¿Cómo pueden saber qué medidas funcionan en qué circunstancias?.
BASE DE DATOS
Así, junto con colegas de ETH Zurich, el profesor David Wuepper del Instituto de Economía de los Alimentos y los Recursos de la Universidad de Bonn han elaborado una completa base de datos que contiene 6.124 políticas de más de 200 países que se adoptaron entre 1960 y 2022.
En éste sentido, explica Wuepper, que también es miembro del Grupo de Excelencia PhenoRob de la Universidad de Bonn: “En primer lugar, la medida tiene que ser relevante de alguna manera para la agricultura, como el uso de la tierra, los fertilizantes nitrogenados o los pesticidas. Pero la conservación de los bosques también está incluida, porque en muchos países está vinculada a la agricultura”.
Las medidas también deben tener importancia nacional, es decir, no pueden centrarse demasiado, por ejemplo, en el nivel local. Se pueden agregar nuevas áreas temáticas a la base de datos en cualquier momento. El profesor David Wuepper explicó: “Le dimos deliberadamente una estructura modular para poder seguir ampliándolo”.
Dicho investigador agregó: “Se podría esperar que los países de ingresos más altos implementen un mayor número de medidas ecológicas porque el medio ambiente está adquiriendo cada vez más importancia en términos relativos en el frente político”. Ggracias a su base de datos, ahora se ha podido confirmar que efectivamente así es.
VÍNCULOS
Por ejemplo, en los países de Oriente Medio se cuenta con relativamente pocas políticas agroambientales, dado su nivel de ingresos. Esto demuestra que los países deben hacer un esfuerzo activo para implementar políticas sostenibles y que esto no sucederá por sí solo.
Sin embargo, lo que realmente logren estas políticas es otra cuestión completamente distinta. “Pero esto también es algo que puede y debe investigarse con ayuda de la base de datos”, afirma Wuepper.
“La comparación de los niveles de erosión del suelo a lo largo de las fronteras nacionales mostró que los países ejercen una influencia significativa”, revela Wuepper y añade: “En ese momento pudimos demostrar un vínculo con la agricultura y también pensamos que las políticas nacionales podrían ser un factor de influencia”. Sin embargo, no pudimos investigarlo porque no teníamos datos sobre las políticas relevantes de los países para comparar a escala global”.
Armados con su nueva base de datos de políticas, los investigadores ahora han podido investigar en qué medida esta importante influencia que los países ejercen sobre la erosión global puede explicarse por sus políticas. Han descubierto que las políticas nacionales de gestión del suelo representan al menos el 43 por ciento del impacto de un país en la erosión del suelo.
Para conocer, descargar y acceder a la referida base de datos de políticas públicas, revise: “Countries’ Agri-Environmental Policies Database”